Cada vez nos preocupamos más por lo que comemos y cómo eso repercute en nuestra salud. Es por ello que decidimos cambiar nuestra alimentación, en mayor o menor medida.
Algunas personas se hacen vegetarianas, otras veganas y, cada vez más, realfooders que se proponen diariamente evitar comer comida ultraprocesados.
Lo que sí es cierto es que muchas personas han optado por reducir el consumo de carne. En cierta medida, puede deberse al informe que publicó la OMS, del que muchos medios se hicieron eco. Este informe habla sobre la vinculación del consumo de carne roja y carne procesada con el cáncer. La Organización Mundial de la Salud aclaró que solo había que reducir su consumo. Aunque especificaba que se podía tener una alimentación más saludable si se consumía en menor medida.
Vitaminas para la vista
Para una alimentación sana y equilibrada hay que conseguir las vitaminas y minerales necesarios. Aunque no hay dificultad para encontrarlos en una alimentación vegetariana ni en una completamente vegana, sí hay algunos nutrientes que se encuentran en menor medida en el reino vegetal que en el animal. Algunos de estos nutrientes están relacionados con el buen funcionamiento de la vista.
No hay motivo de alarma en absoluto. Pero, dado que la alimentación más convencional en nuestra cultura suele incluir una importante cantidad de productos de origen animal, si decidimos pasarnos a una alimentación vegetariana, hay que prestar un poco más de atención a lo que comemos.
Nuestra vista hay que cuidarla. Además de proteger nuestros ojos con gafas de sol de elementos externos como el frío, el sol o la nieve, tenemos que prestar atención a lo que comemos para que en nuestra alimentación no falte ninguna vitamina y gocemos de una visión óptima.
Limitar o eliminar de nuestra dieta los productos procesados, sean del origen que sean, es algo que mejorará tu salud en general.
¿Qué vitaminas cuidan tu vista? Te contamos algunas de ellas y dónde encontrarlas:
- Vitamina A: ayuda a mejorar la visión nocturna y previene de problemas como las cataratas. Está presente en los lácteos y en frutas y verduras, como las zanahorias, las verduras de hoja verde (espinacas, por ejemplo), el brócoli, los espárragos, los tomates o los melocotones.
- Grupo de Vitamina B: la B1, B2, B6, B12 y el ácido fólico ayudan a proteger los ojos de enfermedades degenerativas. Estas vitaminas podemos encontrarlas en la carne, algunos pescados, legumbres, espinacas y otras verduras verdes, cereales o huevos.
Hay estudios de investigación sobre el tema de la B12, pero no entraremos en detalle aquí. Sólo diremos que, si no consumimos carne, para no pillarnos los dedos, es conveniente que tomemos un suplemento.
- Vitamina C: ayuda a reducir el riesgo de padecer una enfermedad ocular. Podemos encontrarla en todas las frutas y verduras, especialmente en las naranjas, kiwis, tomates o pimientos.
- Vitamina E: puede ayudar a los músculos oculares y prevenir la visión borrosa. Las semillas, las nueces, las almendras, el aceite de oliva, las espinacas o el aguacate son una fuente rica en vitamina E.
Hay otros minerales y nutrientes que nos ayudan con nuestra vista:
- Calcio: fundamental para nuestra salud. Además de en productos lácteos, se encuentra en muchas verduras. Especialmente en crucíferas como el brócoli, las coles de Bruselas y la coliflor.
- Selenio y Zinc: el Selenio ayuda a tu cuerpo a absorber la vitamina E. Además ayudan a prevenir el envejecimiento ocular. Estos minerales los tenemos en el trigo integral, en el ajo, en mariscos, en el arroz integral, en el chocolate negro o en los frutos secos.
- Omega 3: tiene muchas ventajas para nuestra salud visual, incluido en el tratamiento de la sequedad en los ojos. Podemos encontrarlo en pescados azules, mariscos, algas, frutos secos, aguacates, semillas de lino, semillas de sésamo, coles o pepinos.
Elegir una dieta vegetariana no tiene por qué ser perjudicial y es una decisión sana y respetable.
Tan solo hay que planificar un poco lo que comemos. Sobre todo al principio, hasta que estemos acostumbrados. Además, debemos completar nuestra alimentación con alimentos ricos en estas vitaminas y minerales.
Al fin y al cabo, no olvidemos que los problemas con nutrientes pueden aparecer en cualquier tipo de alimentación. Llevar una dieta equilibrada, sea esta del tipo que sea, preocupándonos por nuestra salud, es responsable. Por último, indicaremos que, más allá de la cuestión de la carne, limitar o eliminar de nuestra dieta los productos procesados, sean del origen que sean, es algo que mejorará tu salud en general.
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