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Si eres asiduo a los viajes en avión seguro que en alguna ocasión has sufrido un barotraumatismo. Pero, ¿qué quiere decir esa palabra? Algo muy simple, es una sensación de taponamiento o molestia en un oído que puede llegar a durar varios días después de haber cogido un vuelo. Y, ¿sabes por qué se produce y qué puedes hacer para evitarlo? Te lo contamos a continuación.
El barotraumatismo puede surgir en dos momentos concretos de un trayecto en avión: durante el despegue o durante el aterrizaje. Es entonces cuando la presión del aire de la cabina cambia bruscamente, haciendo que no coincida con la presión del interior del oído. El barotraumatismo se da porque la trompa de Eustaquio no es capaz de reaccionar a ese rápido cambio de presión y el tímpano no vibra como lo hace habitualmente. Este mismo problema se puede sufrir practicando buceo o por una explosión cercana.
Los síntomas más clásicos del barotraumatismo seguramente los conocerás. Normalmente se manifiesta con una molestia en el oído (suele ser solo en uno), la sensación de que tienes algo que te presiona e incluso puedes tener una ligera pérdida de audición. En algunos casos más graves, pero poco habituales, se puede llegar a una presión o dolor intenso, zumbidos o incluso al sangrado del oído, aunque esto último apenas se da.
Si no remite en unos días, consulta con tu médico
Lo cierto es que la sensación de taponamiento de un oído tras un vuelo es algo pasajero, que suele desaparecer en un plazo máximo de dos o tres días. Si en ese plazo el barotraumatismo no ha desaparecido por sí solo, acude a tu médico de cabecera. El facultativo podrá hacer un diagnóstico personalizado con tu historia y te examinará el oído afectado con un otoscopio.
Si las molestias no desaparecen en pocos días, un médico puede recomendarte hacer maniobras de Valsalva o un tratamiento
Será el médico el que te pueda dar recomendaciones tanto para acabar con el dolor o sensación en el oído. En función de su diagnóstico, puede recomendarte practicar tú mismo maniobras de Valsalva o un tratamiento mediante aerosoles, descongestionantes o medicamentos para aliviar el dolor. Igualmente, sólo con la recomendación previa de un médico podrás emplear una de esas soluciones. No te automediques sin antes contar con la opinión de un profesional.
Cinco consejos para evitar que se te taponen los oídos en un vuelo
El mejor remedio para no sufrir un barotraumatismo es la prevención. A continuación te damos una serie de consejos o trucos que puedes emplear para evitar este problema:
- Bosteza durante el despegue y el aterrizaje. Sí, así de simple. Bostezar te ayuda a activar los músculos que abren las trompas de Eustaquio.
- Mastica un chicle o caramelo. Es otra de las sencillas acciones que puedes hacer al comienzo o final del trayecto para activar los músculos que previenen el barotraumatismo.
- No duermas durante el aterrizaje o despegue. Simplemente porque no podrías hacer ninguna de las anteriores acciones.
- Evita, si es posible, volar si estás sufriendo un resfriado, congestión nasal, sinusitis u otitis, ya que las probabilidades de tener problemas aumentan.
- Usa tapones filtrados para oídos. Están a la venta en farmacias o tiendas de aeropuerto. Te ayudan a que la presión del tímpano se equilibre más lentamente.
En el caso de los niños, los más pequeños pueden chupar un biberón o un chupete, mientras que los algo más mayores pueden recurrir a mascar chicle o a algo que seguro que les gustará: sorber o soplar mediante una pajita. Igualmente, evita, como en el caso de los adultos, que estén dormidos durante el aterrizaje o el despegue.
Esperamos que estos consejos te sean de utilidad. Recuérdalos la próxima vez que vayas a coger un vuelo. Recuerda también que en Medical Óptica Audición cuidamos de tu audición. Pide cita en uno de nuestros centros para hacerte un chequeo auditivo completo, totalmente gratuito para miembros de nuestro Club Premium.