Seguro que ya conoces muchos de los efectos negativos del tabaco, como sus sustancias tóxicas que afectan al cerebro, los pulmones, el corazón o la vista, perjudicando a la tensión ocular y cómo afecta el tabaco a la retina. Pero estos efectos nocivos también llegan a dañar el aspecto físico, como la aparición de bolsas en los ojos.
Las bolsas en los ojos son una retención de líquidos en la zona baja del párpado inferior. En algunos casos, existe también una formación de grasa en la zona ocular en el párpado superior. Esta acumulación de grasa que se denomina médicamente septo orbitario o celulitis preseptal.
El día 31 de mayo es el día mundial sin tabaco y es una fecha importante para la concienciación de los problemas que puede ocasionar. Estas son las principales dolencias que afectan a los ojos como consecuencia del humo del tabaco según un informe del Centro de Salud Fuensanta de Valencia en urgencias oftalmológicas de Atención primaria.
Como se puede ver, la celulitis preseptal, es una de las principales atenciones realizadas y su relación con el tabaco es debida a la compresión por inflamación de los vasos sanguíneos y cuerpos grasos de la zona ocular.
Una de las opciones que comúnmente se conoce para combatir esta retención de líquidos o grasa, es el descanso. Durante el descanso el sistema linfático hace una limpieza de toxinas que han sido introducidas por el tabaco. La velocidad de eliminación de toxinas por parte del cuerpo y la introducción de nuevas toxinas del tabaco hace que, aunque se duerma para combatir las bolsas en los ojos, sea improbable que tenga un efecto recuperador.
A los problemas oculares derivados de las toxinas del tabaco, de un reciente estudio de la Universidad Johns Hopkins de Baltimore (Estados Unidos), un fumador tiene hasta cuatro veces más probabilidades de dormir mal. Esta dificultad para descansar puede ser debida a la abstinencia a la nicotina que un fumador sufre durante la noche, provocando intranquilidad durante el sueño, un mal descanso y la aparición de bolsas bajo los ojos.
Pero además de las antiestéticas bolsas en los ojos, el tabaco también provoca otros daños al aspecto físico:
- Envejecimiento prematuro de la piel y arrugas
- Dientes y dedos amarillentos
- Pelo más fino y con pérdida del brillo natural
- Problemas de cicatrización
- Más probabilidades de tener estrías
Beneficios de dejar de fumar
Dejar de fumar permite mejorar las capacidades de gusto y olfato. Además, se notan importantes avances en el aspecto y la salud de la piel y permite mejorar mucho la calidad de vida:
- Dejar de fumar a los 30 años: reduce en más del 90% la probabilidad de morir de forma prematura por alguna de las enfermedades relacionadas con el tabaco.
- Dejar de fumar a los 40 años: la probabilidad de muerte prematura se reduce en más del 70%.
- Dejar de fumar a los 50 años: la probabilidad de muerte prematura se reduce en más del 50%.
Lo que está claro es que cuanto antes se deje de fumar, mayores serán los beneficios obtenidos. Unos beneficios que empiezan a notarse a los 20 minutos de dejar de fumar y que se multiplican progresivamente:
- A los 20 minutos: la presión arterial disminuye
- A las 12 horas: el monóxido de carbono en sangre se normaliza
- Entre las 2 semanas y los 3 meses: mejora la circulación sanguínea, así como la función pulmonar
- Entre el primer y el noveno mes: se reducen la tos, la falta de aire y el riesgo de infecciones
- Al cabo de un año: mejora la energía y se reduce a la mitad el riesgo de padecer enfermedad coronaria
- A los 5 años: se reduce a la mitad el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago y vejiga, y se iguala, con respecto a los no fumadores, el de cáncer de cuello y el de accidente cerebrovascular
- A los 10 años: se reduce a la mitad el riesgo de cáncer de pulmón, y también se reduce el riesgo de cáncer de laringe y de páncreas.
- A los 15 años: se iguala con los no fumadores el riesgo de sufrir enfermedad coronaria
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