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Como cada año, este 25 de febrero se celebra el Día Internacional del Implante Coclear. Se conmemora la fecha en la que los doctores franceses Djourno y Eyrès realizaron la primera implantación coclear en el año 1957. Desde ese momento ha sido una continua evolución y se han convertido en toda una revolución para las personas con una deficiencia auditiva severa.
A través de los implantes cocleares se ha conseguido que una persona que sufre una sordera total o casi total pueda recuperar funcionalmente el sentido del oído a través de la estimulación del nervio auditivo. Gracias a esto, ya son más de 19.500 españoles los que pueden vivir de una manera más accesible y recuperar su calidad de vida.
¿Cómo funcionan los Implantes Cocleares?
El implante coclear es un dispositivo electrónico que captura el sonido exterior con uno o varios micrófonos y que, mediante una intervención quirúrgica, se introduce en el interior de la cóclea. De esta manera, el procesador externo transmite una señal al procesador interno a través de un imán.
Durante el proceso, una parte de este dispositivo se implanta quirúrgicamente dentro del hueso que rodea el oído y consta de un estimulador-receptor. Una vez la cirugía cicatriza, se coloca la segunda parte del implante coclear, que es el dispositivo externo, que está formado por un micrófono receptor, un procesador de lenguaje y una antena. Esta parte del dispositivo es la que recibe el sonido, lo convierte en señal eléctrica y lo envía a la parte interna del implante coclear.
Es importante recalcar que un implante no permite recuperar la audición normal, sino que permite a la persona sorda poder comprender el habla y los sonidos de su alrededor.
Diferencias entre los audífonos y los implantes cocleares
Los implantes cocleares y los audífonos son cosas muy diferentes. Mientras que los audífonos los utilizan las personas que tienen una pérdida auditiva, los implantes cocleares están destinados a aquellas personas que son sordas o con problemas graves de audición.
Los audífonos tienden a amplificar los sonidos para que las personas con oídos dañados puedan detectarlos. Mientras, el implante coclear permite a las personas entender otros sonidos, reconocer señales de advertencia y poder tener una conversación ya sea en persona o por teléfono. Pero hay que tener en cuenta que escuchar a través de un implante, debido a su dificultad, requiere un tiempo de aprendizaje que con un audífono no es necesario.
¿Quiénes pueden usar un implante coclear?
Sin importar la edad, cualquier persona que es sorda o que padece de problemas graves de audición puede ser candidata a un implante coclear.
En el caso de los adultos, no importa si nacieron con sordera o se quedaron sordos tras aprender a hablar, aunque lo más común sea que hayan perdido la audición de manera completa o parcial en una etapa más avanzada de su vida. Para ellos resulta más sencillo aprender a asociar las señales captadas por los implantes. Esto se debe a los sonidos que recuerdan e incluso a que saben leer los labios, asociar señales o lenguaje de señas.
En el caso de los niños a partir de 1 año que son sordos o tienen problemas graves de audición, el uso de un implante coclear es fundamental para el desarrollo del habla y del lenguaje. Al encontrarse en un periodo crítico para el desarrollo, los pequeños que cuentan con un implante coclear antes de los 18 meses desarrollan mucho mejor sus capacidades de escucha, de comprensión de los sonidos y del habla.
Es necesario recalcar que, tras la implantación, es recomendable realizar una terapia de logopeda para que el paciente se habitúe a la estimulación de los sonidos de una manera rápida.
Beneficios y ventajas de los implantes cocleares
Es bien sabido que el beneficio más claro es recuperar funcionalmente el sentido del oído. Pero no es ese el único problema que se soluciona con estos implantes. Las relaciones sociales y laborales de los pacientes mejoran considerablemente una vez cuentan con un implante coclear. Todo su entorno, la localización de sonidos, el poder comunicarse de una manera más sencilla, poder desarrollarse de manera intelectual y cognitiva y deshacerse del aislamiento social son algunas de las tantas ventajas que tienen.
¿Se puede hacer vida normal con un implante coclear?
Es cierto que una persona con un implante coclear necesita de un periodo de adaptación para poder amoldarse a este aparato. Pero la realidad es que son fáciles de usar, flexibles y se adaptan a las necesidades de quien lo usa, por lo que se puede hacer vida normal sin complicaciones.
Una vez la cirugía haya sanado, apenas hay restricciones. Además, los implantes cocleares son compatibles con teléfonos móviles y todo tipo de aparatos electrónicos. También se puede practicar deporte sin problema, salvo en ocasiones, si el deporte es de contacto, por si se pudiese correr el riesgo de trauma para el dispositivo.
La única restricción para la mayoría de personas con un implante coclear son las resonancias magnéticas, ya que el implante está hecho de metal.
Los avances de los implantes cocleares no dejan de evolucionar debido al constante trabajo y estudio por parte de profesionales. El objetivo siempre será mejorar los resultados auditivos, así como las limitaciones que este pueda tener en cuanto a su tamaño, para una mejor comodidad, y la autonomía de la batería o pilas, para aumentar así su duración. Las mejoras no paran de llegar y, con ellas, la mejora de calidad de vida de las personas.
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